Unas tres cuartas partes de la población mundial están en lo que se llama la “trampa del ingreso medio”, alerta el Banco Mundial.
Octubre 17, 2024.- La “trampa del ingreso medio” es una situación que afecta a millones de personas en todo el mundo. De acuerdo con el Banco Mundial (BM), alrededor de 6,000 millones de personas, lo que equivale aproximadamente a tres cuartas partes de la población global, viven en países considerados de ingresos medios. Esto significa que una gran parte de la humanidad se encuentra estancada en lo que los economistas de la institución denominan como la “trampa del ingreso medio”, un fenómeno económico que representa un serio obstáculo para el desarrollo.
Esta situación es crucial porque, de no resolverse, las consecuencias a largo plazo podrían ser devastadoras. Es urgente que la mayoría de estas personas logren alcanzar un nivel de ingresos más alto antes de envejecer. De lo contrario, los costos asociados con la seguridad social y los sistemas de pensiones aumentarán a niveles insostenibles para muchas economías. El envejecimiento de la población es un reto inminente para países atrapados en esta trampa, ya que, sin un crecimiento económico robusto, los recursos para sostener a las futuras generaciones de adultos mayores podrían agotarse rápidamente.

Crecimiento económico lento y factores agravantes
Uno de los principales problemas de los países de ingresos medios es que su crecimiento económico tiende a ser mucho más lento en comparación con naciones desarrolladas o en desarrollo. El Banco Mundial califica este tipo de crecimiento como “diferente”, ya que carece del dinamismo necesario para generar una verdadera transformación económica. Además, otros factores, como el cambio climático, hacen que el progreso económico sea aún más complicado. Estos países enfrentan el doble reto de adaptarse a un entorno climático en constante cambio mientras intentan salir de la trampa del ingreso medio.
En un informe reciente titulado “Las trampas del desarrollo de América Latina y el Caribe y las transformaciones indispensables“, el Banco Mundial analiza los problemas estructurales que afectan a varios países de la región. Entre ellos, destaca México, que se enfrenta a un desafío particular: el país necesita cambiar de un modelo de crecimiento basado en la acumulación de recursos a uno que se centre en la innovación. Sin esta transformación, México, al igual que otros países de la región, seguirá atrapado en una transición interminable, sin lograr el desarrollo pleno.
El deterioro del ingreso en México
México ha enfrentado problemas económicos similares desde hace años, pero no ha logrado resolverlos debido a factores que se han señalado en repetidas ocasiones. En 1990, a pesar de la crisis económica de la década anterior, México tenía un ingreso per cápita 50% superior al de Chile. Sin embargo, en la actualidad, la situación se ha invertido: el ingreso per cápita de México es 40% inferior al de Chile. Este es un claro ejemplo del deterioro del ingreso generado por la “trampa del ingreso medio”.
Este deterioro no solo se refleja en las comparaciones internacionales, sino que también ha afectado la calidad de vida de la población mexicana. La falta de un crecimiento económico sostenido ha impedido que el país genere las condiciones necesarias para salir de esta trampa, lo que ha llevado a un estancamiento en los ingresos de amplios sectores de la población. La clase media, en particular, ha sufrido las consecuencias de este estancamiento. Muchos se ven atrapados en una “zona de confort” donde sus ingresos son suficientes para mantener un estilo de vida básico, pero no les permiten prosperar o mejorar su situación económica con el tiempo.
La pandemia y el retroceso de la clase media en México
La pandemia de COVID-19 empeoró aún más esta situación. Según las estadísticas, la clase media en México se redujo considerablemente en los últimos años. En 2018, se estimaba que 53.4 millones de personas pertenecían a la clase media, pero para finales de 2020, esa cifra había disminuido a 47.2 millones. Esto significa que alrededor de seis millones de personas cayeron fuera de este segmento debido a la pérdida de empleos, la disminución de la actividad económica y la falta de movilidad social. Aunque ha habido cierta recuperación en los años posteriores, los economistas del Banco Mundial señalan que no existen datos claros que indiquen que la clase media en México haya vuelto a sus niveles previos a la pandemia.
Desigualdad y pobreza: el desafío global
La permanencia de los países en la trampa del ingreso medio también tiene un impacto directo en la pobreza y la desigualdad. Los economistas del Banco Mundial advierten que, con una media de pobreza establecida en 6.85 dólares al día para países de ingreso medio alto, el 44% de la población mundial vive en condiciones de pobreza. Este dato subraya el poco avance que se ha logrado en términos de crecimiento económico sostenido. A pesar de los esfuerzos, aún es una tarea urgente salir de esta trampa, ya que la desigualdad sigue siendo uno de los mayores desafíos en muchas partes del mundo.
En el caso de América Latina, una de las regiones más afectadas, la situación es especialmente preocupante. A pesar de que parece que se están haciendo esfuerzos significativos para combatir la pobreza y la desigualdad, la realidad es que aún queda mucho por hacer. Los economistas del Banco Mundial concluyen que, sin un cambio estructural profundo en las economías de la región, será imposible superar la trampa del ingreso medio y las consecuencias sociales que conlleva.- AltoNivel.com