El expresidente estadounidense intensifica sus críticas contra Harvard por la presencia de miles de estudiantes internacionales, a quienes señala como beneficiarios de una educación financiada por EE. UU. sin cooperación de sus países de origen.
- Trump arremete contra Harvard: exige lista de estudiantes extranjeros y acusa a países “hostiles” de no pagar por su educación
El presidente Donald Trump volvió a generar polémica este fin de semana tras publicar un mensaje en su red social Truth Social en el que exigió a la Universidad de Harvard que entregue los nombres y países de origen de sus estudiantes internacionales, al tiempo que cuestionó duramente que naciones “no amigas” de Estados Unidos se beneficien del prestigioso sistema educativo sin aportar recursos económicos.
“¿Por qué Harvard no dice que casi el 31 % de sus estudiantes son de PAÍSES EXTRANJEROS, y sin embargo esos países, algunos nada amigos de Estados Unidos, no pagan NADA por la educación de sus estudiantes?”, escribió Trump la madrugada del domingo.
Según Trump, su eventual nueva administración “quiere saber quiénes son esos estudiantes extranjeros”, afirmando que Harvard “no es exactamente comunicativa” y sugiriendo que podría haber implicaciones de seguridad nacional. “Queremos esos nombres y países”, insistió el republicano.
El presidente, que busca regresar a la Casa Blanca en 2025, ha intensificado sus críticas hacia las universidades de élite, a las que acusa de ser bastiones de lo que él llama la “izquierda radical”. Esta nueva ofensiva se da en un contexto de creciente disputa entre Harvard y el entorno político trumpista, luego de que la universidad se negara a acatar ciertas demandas políticas impuestas desde Washington.
La tensión escaló la semana pasada, cuando Trump propuso prohibir el ingreso de estudiantes internacionales a Harvard, una medida que fue bloqueada por un juez federal tras una demanda presentada por la propia universidad. La iniciativa generó alarma entre instituciones académicas, líderes empresariales y defensores de la educación internacional.
A pesar de la afirmación de Trump, datos oficiales de la propia universidad contradicen algunos de sus señalamientos. Para el ciclo escolar 2024-2025, alrededor del 27 % del alumnado de Harvard proviene del extranjero, es decir, unos 6,793 estudiantes de grado y posgrado originarios de al menos 147 países y territorios.
De acuerdo con la sección de ayuda financiera del portal de Harvard, los estudiantes internacionales no pueden acceder a financiamiento federal estadounidense, pero sí pueden ser beneficiarios de fondos privados de la propia universidad, incluyendo becas y empleos estudiantiles. Además, desde octubre de 2024, Harvard ya publica una lista con los países de origen de sus estudiantes internacionales, siendo China, Canadá, India, Corea del Sur y Reino Unido los principales emisores.
Los comentarios de Trump se enmarcan en una estrategia más amplia de retórica nacionalista en el ámbito educativo. Durante su presidencia, ya había implementado restricciones a visas estudiantiles, endurecido requisitos migratorios y cuestionado el valor de la diversidad internacional en instituciones académicas.
Ahora, con el nuevo ciclo electoral en marcha, el exmandatario parece buscar reactivar viejas narrativas que conecten con su base electoral: control fronterizo, desconfianza hacia China, defensa del “contribuyente estadounidense” y rechazo a las élites académicas.
Sin embargo, especialistas advierten que esta postura podría tener efectos negativos tanto en la reputación internacional de las universidades como en la economía del conocimiento estadounidense, que se apoya fuertemente en el talento global.
“Esta retórica puede causar un efecto disuasivo en investigadores y estudiantes brillantes que consideran a EE. UU. como destino académico. Es una amenaza no solo para Harvard, sino para todo el ecosistema científico del país”, afirmó la profesora Carla Montemayor, analista de políticas educativas en la Universidad de Georgetown.
Hasta el momento, la Universidad de Harvard no ha emitido una declaración formal en respuesta a las nuevas publicaciones de Trump. No obstante, funcionarios académicos ya han defendido en ocasiones anteriores el valor de la diversidad internacional como componente esencial de su excelencia académica y han rechazado cualquier intento de politización del acceso a la educación superior.
La Gaceta Yucatán—Redacción.