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Fotografía de lluvia de estrellas.

Asombrosa lluvia de estrellas perseidas: 5 consejos para disfrutarla al máximo en Yucatán

Por La Gaceta Yucatán

El cielo nocturno nos regalará cerca de la mitad de agosto un espectáculo inigualable, porque ninguna otra lluvia de estrellas es tan copiosa como la de las perseidas, también llamada Lágrimas de San Lorenzo, porque ‘se pega’ a la celebración de este santo de la iglesia católica.

Aunque la frecuencia en la cifra de los meteoros que caen por minuto puede variar según sea la fuente, la voz más reconocida es sin duda la de la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA, por sus siglas en inglés) asegura que en los mejores momentos de la lluvia de estrellas se podrán ver entre 50 y 75 ‘destellos’ por hora.

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Lluvia de estrellas vista desde el estado de Virginia en Estados Unidos.

Estos significa que, en promedio, en el mejor momento de la meteor shower -término como se le conoce en inglés a la lluvia de estrellas- podrán verse –a simple vista, sin necesidad de equipos especiales como telescopios– prácticamente hasta un destello por minuto.

Este espectacular fenómeno astronómico nocturno, en el que al ojo humano parece que las estrellas caen -en realidad, no se precipitan, es una percepción visual- es visible desde inicios de agosto y hasta más o menos el 25, sin embargo, el mejor día para verla -según el Diques de Preston, quien escribe para la NASA un artículo sobre el tema- es entre la noche del 11 de agosto y la madrugada del 12.

Vista de la lluvia de estrellas perseidas, vista desde Park City, Utah. NASA/Bill Dunford

Si bien la lluvia de estrellas puede verse desde que el sol se oculta, la mejor hora para verla siempre será en la madrugada, pues, de acuerdo con las recomendaciones de la NASA, la frecuencia con que puede verse destellar los meteoritos al chocar con la atmósfera terrestre aumenta conforma amanece.

Una de las dudas más frecuentes es hacia qué dirección de la bóveda celeste debemos dirigir la mirada para ver la lluvia de estrellas, la respuesta es hacia el noreste. Sin embargo, los destellos pueden ‘surgir’ en cualquier parte, por lo que, para que disfrutes más el espectáculo nocturno, te dejamos unas recomendaciones, algunas de ellas dictadas por el astrónomo yucateco Eddie Salazar Gamboa.

5 recomendaciones para ver mejor la lluvia de estrellas

  1. Acude al lugar con más oscuridad -siempre en grupo, por seguridad- al que puedes acceder, pero que estés seguro. En el caso de Yucatán, las zonas costeras lejanas a los centro urbanos son los más recomendables.
  2. Espera los primeros minutos minutos de la madrugada y trata de aguantar hasta el amanecer.
  3. Al llegar, antes de ‘rastrear’ la lluvia de estrellas, apaga todas las luces artificiales, sin excepción, pues incluso el brillo mínimo de la pantalla de tu celular puede obstaculizar la visión. Espera unos 15 minutos sin tener ‘contacto’ con luz.
  4. La NASA recomienda acostarse para tener un mayor campo visual de la bóveda celeste. Pero también es recomendable que cada uno de los que asisten vea hacia un punto de los cuatro cardinales: Norte, Sur, Este y Oeste, para que ubiquen el donde más ocurren los destellos.
  5. No utilices ni telescopio, ni binoculares, ni cámaras fotográficas, mucho menos las de tu celular para intentar ver mejor las luces destellantes. Lo idea es usar tu propia capacidad visual.

Como un consejo adicional, te diremos que seas paciente, sobre todo si por ahí se atraviesa alguna nube, porque el mejor momento de la lluvia de estrellas será, sin duda, un real ejercicio de esperar.

El origen de la las lluvias de estrellas

Más que el origen, lo preciso es hablar de las causas de la lluvia de estrellas o de meteoros: en su ciclo orbital, la Tierra atraviesa por áreas donde hay restos de cometas; en el caso de las perseidas, se trata de ‘desechos’ de llamado 109P/Swift-Tuttle.

Cuando estas ‘rocas’ chocan con la atmósfera, se incendian y es lo que nosotros vemos como destellos y, como pueden caer varios a la vez, nuestra percepción es que se trata de una lluvia. Aunque la explicación pueda ser simple, todo lo que ocurre es extraordinario y más si lo vemos.