Los rangos son valores indispensables para el funcionamiento de cualquier organización militar, y es casi imposible que algo falle porque todo se deriva de procedimientos bien establecidos y roles: nadie puede hacer algo si no le corresponde o si no tiene la facultad… y aún así, la Secretaría de la Defensa (Sedena) perdió un juicio por más de 86 millones de pesos, debido a que quien impugnó un contrato con una empresa carecería de las atribuciones para hacerlo.
Así lo determinó la Sala Superior del Tribunal Federal de Justicia Administrativa (TFJA), con la sentencia definitiva que publicó el pasado 2 de enero, por un juicio de nulidad administrativa, lo que indica que la Sedena no podrá recuperar un monto millonario por el incumplimiento de contrato que se había promovido contra la empresa empresa Energía Solar y Proyectos de Ingeniería, encargada de surtir balasto para el Tren Maya.
De acuerdo con una publicación de la revista Proceso, la Secretaría exigió, mediante un litigio, la devolución de un anticipo de unos 86’000,000 de pesos por el material para el tramo 6 del ferrocarril, porque consideraba que la empresa había demorado demasiado en la entrega.
Puede interesarte: Aeropuerto de Mérida retrocede en viajeros nacionales
La recisión fue sobre el contrato con el expediente D.G.INGS.-AIFA-T7-F5-MRA0120-CONV-PL-A-2022-C-ITP-001, firmado el general Gustavo Ricardo Vallejo Suárez, comandante del Agrupamiento de Ingenieros de la Sedena, y la empresa.
El contrato tiene fecha 4 de octubre de 2022, y ampara un monto de 535’446,799 pesos, y con término el 31 de diciembre de 2023, para suministrar 208,903 metros cúbicos de piedra triturada de balasto, que debía entregarse en Chetumal y Bacalar, Quintana Roo, donde se trazaba el tramo 6 de la vía ferroviaria
La primera entrega estaba programada antes del 31 de marzo de 2023, y la segunda, a más tardar para el 30 de abril también de ese año. Aparentemente -así lo argumentó la empresa- por el mal tiempo (lluvias intensas), no se cumplió con alguno de los plazos establecidos.
En el oficio de rescisión contractual con folio LOG/M.R.A./AIFA-T6-F7-4797, del 9 de junio de 2023, firmado por el general ingeniero residente de la obra, Vallejo Suárez, la empresa no cumplió con la entrega del material en tiempo y cantidades pactadas. Sedena, en cambio, había pactado un anticipo de 107 millones 89 mil 359 pesos, que supuestamente sí entregó.
En la primera sentencia de la Sala Metropolitana se recortó la cantidad reclamada a 86 millones 462 mil 160 pesos; luego, la empresa protestó y los juzgados le dieron la razón al demostrar que le fue rescindido por un militar que no tenía la atribución para hacerlo, pues la rescisión contractual la firmó el general Vallejo no tenía facultades para hacerlo, pues en 2019 el instituto armado omitió otorgarle la potestad para rescindir contratos.
