El pontífice argentino planea saludar a los fieles al final de la misa de Resurrección, aunque el Vaticano prioriza la prudencia debido a su estado de salud tras una larga convalecencia.
19 de abril del 2025.-El Papa Francisco desea participar este domingo en la tradicional bendición Urbi et Orbi desde el balcón central de la basílica de San Pedro, al término de la Misa de Pascua. Así lo informó este sábado la oficina de prensa del Vaticano, aunque aclaró que la decisión final dependerá de su evolución médica.
La presencia del pontífice aparece oficialmente en el programa litúrgico, pero desde el entorno papal insisten en que se actuará con cautela, ya que Francisco continúa recuperándose de una infección respiratoria que lo mantuvo hospitalizado durante 38 días en el hospital Gemelli de Roma.
Semana Santa con presencia limitada
Durante la Semana Santa, el Papa se ha mantenido al margen de los principales ritos, salvo por una visita significativa el Jueves Santo a la prisión romana de Regina Coeli. Allí, como en años anteriores, quiso estar cerca de los reclusos en un gesto de cercanía y humildad.
Aunque no pudo realizar el tradicional lavado de pies, Francisco ofreció palabras de aliento y compartió un momento de oración con 70 detenidos.
“A mí me gusta hacer todos los años lo que Jesús hizo el Jueves Santo, el Lavado de pies, en la cárcel. Este año no puedo hacerlo, pero sí puedo y quiero estar cerca de vosotros”, expresó el Papa ante los internos, según informó la Santa Sede.
Misa de Pascua con participación especial
La misa del Domingo de Resurrección será presidida por el cardenal Angelo Comastri en la Plaza de San Pedro, ante miles de fieles. Está previsto que el Papa aparezca al final del acto para dar la bendición pascual desde la logia de la basílica. En caso de que su estado de salud no le permita hablar, el mensaje será leído por un colaborador cercano.
En su breve aparición pública durante la visita a la cárcel, el Papa se mostró animado y con sentido del humor. A una periodista que le preguntó cómo se sentía, respondió con una sonrisa:
“Estoy sentado”.
Aunque se desplazó en silla de ruedas, como ha sido habitual desde hace tiempo debido a sus problemas de movilidad, Francisco no portaba las cánulas de oxígeno que utilizó en otras ocasiones recientes, lo que fue interpretado como una señal positiva sobre su recuperación.
Prudencia y esperanza
“La vivo como puedo”, respondió Francisco con voz débil cuando se le preguntó por su vivencia de la Semana Santa en medio de su convalecencia. También compartió una reflexión personal:
“Cada vez que entro en un lugar como este me pregunto: ¿por qué ellos y no yo?”
Estas palabras reflejan el tono íntimo y pastoral con el que el pontífice ha querido acompañar a la comunidad católica incluso en medio de sus limitaciones físicas.
Lo que se espera este domingo
La participación del Papa en la bendición Urbi et Orbi, que se da únicamente en Navidad y Pascua, marcaría un momento significativo de su reaparición pública tras semanas de ausencia. Desde la Santa Sede insisten en que se tomará la decisión en el último momento, en función del estado de salud del pontífice.
Mientras tanto, en la Plaza de San Pedro ya está todo preparado. Fieles de todo el mundo se congregarán con la esperanza de recibir la bendición papal en una de las celebraciones más importantes del calendario litúrgico.
La Gaceta Yucatán—Redacción.
