- Jacinto Sosa Novelo, titular de la Agencia de Transporte de Yucatán, advierte ante el Congreso que el modelo actual es inviable y prioriza ganancias privadas sobre la movilidad ciudadana.
1 de mayo de 2025.– El director general de la Agencia de Transporte de Yucatán (ATY), Jacinto Sosa Novelo, compareció este miércoles ante el Congreso del Estado para presentar un panorama crítico del sistema de transporte público Va-y-Ven, revelando un posible déficit financiero de 1,860 millones de pesos al cierre del año y anunciando una reestructuración integral del modelo.
Durante su intervención, Sosa Novelo fue enfático: el esquema actual no es sostenible. Según el funcionario, el modelo heredado apenas cubre el 41% de los costos operativos, lo que podría obligar al estado a destinar más de 11 mil millones de pesos en subsidios durante los próximos seis años si no se aplican cambios de fondo.
“No se pensó en las y los usuarios, sino en asegurar rentas garantizadas para unos cuantos. No venimos a administrar el desastre, venimos a cambiar las cosas y a poner orden”, sostuvo Sosa, quien se abstuvo de mencionar directamente a su antecesor, Rafael Hernández Kotasek, hoy funcionario en el gobierno de Quintana Roo, ni al exgobernador Mauricio Vila Dosal, principales impulsores del actual sistema.
Modelo inviable: contratos onerosos y tecnología inservible
El titular de la ATY desglosó diversos elementos que han contribuido al desequilibrio financiero del sistema, como pagos garantizados a concesionarios por kilómetros no recorridos, lo que representa un gasto anual de 264 millones de pesos sin correlato en servicio efectivo.
Asimismo, denunció la adquisición de tecnología a sobreprecio, que además no cumple con los estándares operativos mínimos, generando un costo acumulado superior a 400 millones de pesos. A esto se suma el fracaso en la transición tecnológica de tarjetas de acceso al sistema, con 30 millones de pesos perdidos en plásticos inservibles comprados en 2024.
Uno de los casos más preocupantes señalados fue el del sistema de transporte eléctrico IE-TRAM, que registra ingresos muy por debajo de sus costos reales de operación, poniendo en entredicho su viabilidad económica a mediano plazo.
Además, mencionó contratos de largo plazo, como el del CETRAM Norte, que comprometen al Estado a pagar 22.2 millones de pesos anuales durante 15 años, sin que el inmueble pase a formar parte del patrimonio público.
Llamado a construir un nuevo modelo con visión social y técnica
Actualmente, el sistema de transporte público de Yucatán moviliza a más de 480 mil personas diariamente, conectando Mérida, Kanasín, Umán y municipios del interior como Valladolid y Tizimín. No obstante, Sosa Novelo insistió en que el sistema no puede seguir operando con un diseño financieramente insostenible, ni con una lógica centrada en intereses particulares.
Hizo un llamado a los legisladores a trabajar en conjunto en una reforma profunda, basada en principios de eficiencia, justicia social y responsabilidad fiscal.
Como primer paso, anunció el inicio de un estudio de movilidad integral y actualizado, que permitirá comprender por primera vez con precisión los patrones de origen-destino, evaluar rutas actuales, diagnosticar la demanda real y rediseñar el sistema con base en evidencia técnica, algo que nunca se hizo al implementar el actual modelo.
La comparecencia del director de la ATY marca un cambio de narrativa en la gestión del transporte público en Yucatán, al colocar el foco en la transparencia, la sostenibilidad y el beneficio colectivo, en contraste con las decisiones opacas que –según sus declaraciones– han marcado al sistema Va-y-Ven desde su origen.La Gaceta Yucatán—Redacción.